Los Juegos Olímpicos de la ilusión

<h4>Ismael Uali Rojo</h4>

Ismael Uali Rojo

Ismael Uali Rojo es técnico de la Real Federación Española de Piragüismo y también entrenador del Real Club Náutico de Palma. Además compagina su trabajo con la preparación física de deportistas de alto nivel de otras modalidades deportivas.

Ismael Uali Rojo

Ismael Uali Rojo es técnico de la Real Federación Española de Piragüismo y también entrenador del Real Club Náutico de Palma. Además compagina su trabajo con la preparación física de deportistas de alto nivel de otras modalidades deportivas.

Por fin comienzan los Juegos Olímpicos de Tokio. Tras una Olimpiada (periodo entre juegos) alterada, para pasar a ser los cuartos juegos modificados en su año establecido, desde sus comienzos en Atenas en 1896. Estos juegos serán recordados al igual que los de Berlín 1916, Tokio/Helsinki 1940, y Londres 1944 por su anulación. Los tres primeros por guerras entre personas, y este último por otra, pero contra un contrincante invisible.

Poco que explicar de la razón de este retraso. Juegos muy distintos a los que estábamos acostumbrados a vivir, bueno, pocas cosas hacemos ahora, como hacíamos antes. Estos últimos meses nos han marcado de forma conductual, aunque tratemos de volver a la antigua realidad.

Estos juegos serán distintos, pero no serán “descafeinados”, ya que para un deportista el haber llegado hasta esta competición es lo “MÁS” (en mayúsculas, en negrita y si tuviera la posibilidad de utilizar luces de neón, bien sabe que lo utilizaría). Lo que para otros profesionales puede significar estar nominado para el Nobel, Wolf, Oscar, Emmy, Grammy, Pulitzer, Príncipe de Asturias, Palme d´Or, Medalla Fields,… para nosotros es participar en este evento.

Puede que haya gente que diga lo contrario o haya disciplinas que por algún criterio no se encuentren representadas. Pero sin lugar a dudas, y a pesar del miedo o prudencia que ha protagonizado todo el proceso, y doy fé de la cantidad de protocolos, reuniones y medidas que hemos tomado, serán los Juegos de la ILUSIÓN. Al igual que el resto de la población, que ha hecho esfuerzos titánicos para seguir hacia delante… deportistas, técnicos, clubes, federaciones, organizadores y comités, han hecho lo indecible para tener a nuestros deportistas en las mejores condiciones, para tratar de cumplir con el lema: Citius, Altius, Fortius, al que este año, añadiría: Prophylacticus.

El movimiento Olímpico/Paralímpico como un solo concepto, es muy difícil de sintetizar, son muchos periodos, muchos cálculos, muchos tiempos, es mucho más complejo desde dentro, pero todos tienen el mismo objetivo.

La esencia sigue siendo la misma

Lo que le hace tan atractivo, aparte de su historia, es la participación simultánea de modalidades, disciplinas, ejecuciones y técnicas tan dispares, pero que guardan un patrón identificativo en todas y cada una de ellas. Es el UNO, ente individual…

… frente a otros.

… frente a uno mismo.

… frente y con el medio.

… formando parte del colectivo, para formar de nuevo una unidad más grande y fuerte.

… para conseguir un objetivo.

Ya no hablamos de deportes individuales o deportes de equipo, al fin y al cabo, ambos dos requieren para llegar a lo más alto que puedan dar, de la consecución de los objetivos de corto, medio y largo plazo, en base a una serie de principios del entrenamiento adaptable a los dos, tanto biológicos como psicológicos. No voy a negar, que la “música” suena diferente cuando oyes a un solista o a una orquesta, pero hay melodías que hacen que se te erice la piel, sin tener en cuenta si es uno solo o un grupo. Para esto, todo tiene que engranar.

Es el final del camino, un tránsito maravilloso a la vez que duro

Todo deporte, al igual que en cualquier faceta de la vida, que conlleve éxito, guarda tras de sí muchísimas horas de preparación, estudio, fallos, aciertos, decepciones y alegrías. Ya no es solo la correcta sistematización temporal de las capacidades físicas básicas, de las destrezas, de la preparación psicológica, del cuidado de la nutrición y toda la supervisión asociada, mientras vives el día a día, ya seas de un deporte profesional o de un deporte amateur. Es un conjunto de uso de herramientas para hacer que el día “D” a la hora “H” tu cuerpo esté preparado para hacer lo que llevas tanto tiempo preparando. Es el final del camino, un tránsito maravilloso a la vez que duro. En el que tu cuerpo ya está preparado, y la cabeza tiene que permitir reproducir la táctica diseñada, en base a las circunstancias cambiantes del día “D”.

No es fácil, y nadie nos dijo que lo fuera. Pero poder ver cómo, tanto de forma individual o de forma colectiva realizan sus tácticas, como si fuera fácil, como si cualquier ser humano fuera capaz. Que ya no solo es hacer el gesto técnico con maestría, que está al alcance de pocos,  sino hacerlo en el momento determinado y poder alterarla según las circunstancias, prever lo que va a suceder y decidir en milésimas de segundos un cambio que altera todo el procedimiento y que el resto de compañeros saben interiormente lo que está sucediendo y lo complementa, esto es lo que este tipo de eventos tiene.

Y si ya lo queremos complicar más, están las modalidades que el resultado no te lo da una marca, sino que te lo da una evaluación de unos jueces a través de una nota. Como técnico, tendría muy claro qué objetivos, indicadores, evaluaciones, puntos control hacer para la preparación del deportista de este tipo y como tener mi guía general e individual de trabajo…pero que difícil tuvo que ser ese día de julio de 1976, en Montreal para la siguiente participante en las barras asimétricas, teniendo que salir a competir con su mejor versión después del 10 de la rumana Nadia Comăneci. ¿Cómo evaluarían los jueces después? El listón ya era muy distinto.

Después de ver un 10, es humano el ver más fallos de los que se verían en situaciones normales. Por lo tanto, en estos casos, como espectador, solo me queda disfrutar, pero como técnico solo me quedaría trabajar, mantener la calma y conservar la línea de desarrollo planificado.

Llegar ya es muy grande, ganar es leyenda

Lo fascinante de estos niveles, es el sumatorio de causas. Es el de participar en unos Juegos y saber si estás para participar o para ganar. Llegar ya es muy grande, ganar es leyenda. Las diferencias entre competidores pueden ser submínimas, el más mínimo detalle determina la balanza para un lado o para otro. Cada técnico elabora su propia técnica para incluir todos los factores según el deportista al que entrena. En algunas ocasiones, dos mismos deportistas siguen caminos distintos en la preparación para llegar a conseguir el mismo objetivo. Es ahí donde entra nuestra participación, siempre lo he comparado como un arte, como pintar un cuadro o hacer una escultura. Nunca salen dos iguales, pero todas tienen parámetros controlables, que según vayan cambiando tienes que ir aportándole los estímulos suficientes para seguir progresando. La palabra entrenamiento, conlleva muchas horas no solo de ejecución sino de planificación. Esta tiene que estar apoyada por diferentes profesionales del deporte específico: administración, biomecánica, fisiología, física, fisioterapia, informática, medicina, meteorología, nutrición, psicología… Y así podría continuar, simplemente he cogido 10 ramas al azar ordenadas en orden alfabético. Todas estas y muchas otras, suman para la mejora de esas cualidades innatas del deportista, que sin ese trabajo no llegaría a este olimpo. Todos conocemos a deportistas con unas capacidades extraordinarias, pero que no llegaron por razones derivadas de la gestión de estas ramas profesionales.

Por esto, quiero expresar, que en el deporte de alto rendimiento, ya no solo hablamos de UNO como deportista, aunque sea la imagen inexorable de todo el trabajo. Estamos hablando de un equipo multidisciplinar. Un equipo que suma, un equipo que se emociona con los logros y siente la decepción ante los fracasos. Pero que sobre todo disfruta con este tipo de trabajo. Un equipo que puede hacer que sus deportistas consigan tener más cerca sus mejores resultados funcionales. Y esto en trabajo multidisciplinar, lo hace más asequible y fácil. Al fin y al cabo, se trabaja en la sombra como van a realizar la práctica competitiva, a la misma intensidad y al mismo nivel. Son muchas horas detrás de las horas de entrenamiento, muchas noches en vela, muchas gráficas analizadas, muchas llamadas de teléfono y consultas

Por tanto, si hablamos de equipo queremos decir que hay una estructura organizativa, ya sea vertical, horizontal, escalar, circular o funcional donde se dan el grueso de procesos, que contienen actividades y flujos de información. 

Estos flujos son trabajados por personas que reciben y guardan datos y que en algún momento del proceso hacen llegar/distribuir y que en otro momento discontinuo o no, deben analizar para su control, con el simple objeto de gobernar el “barco” para llegar a buen puerto. Por lo tanto, hablamos de procesos, que todo lo aquí escrito es un PROCESO (también en mayúsculas, en negrita y si pudiéramos con luces de neón), este debería minimizar su variabilidad para aumentar su replicabilidad para así conocer cuándo introducir cambios con antelación, prever o localizar los fallos y poder solucionarlos para evolucionar.

Actualmente, con los avances existentes, podemos utilizar herramientas de otros sectores en nuestro campo, pero conjugar todos estos procesos, profesionales, conocimientos o datos sin sustentarlos de tecnología, que nos ayude a simplificar todos los procesos, sería una misión complicada. Esta tecnología debe ser eficiente y sobre todo eficaz. Operativa y funcional y sobre todo amigable. Y muy importante, que homogenice los procesos, que podemos tener cada técnico de forma personal, a unos conceptos que podamos comprender todos. Algo que no solo sirva para el hoy y este año, sino que esa información pueda ser usada para objetos mayores. Es decir, poder usar un trabajo para más de un objetivo. Esto haría que, trabajando conjuntamente, ya no solo con nuestro equipo de trabajo, sino buscando correspondencias con otros profesionales de deportes distintos, podamos encontrar relaciones significativas que nos ayuden al rendimiento, ya no solo de nuestros deportistas, sino de muchos otros, contando desde los en la fase de especialización –  alto rendimiento como de los noveles, con programas de detección de talentos, hasta para orientar en relación a salud y rehabilitación.

Estos metadatos de un deportista, pueden marcar una serie de perfiles muy interesantes en los análisis individuales como en el colectivo del mundo del deporte, ya no digo solo de una modalidad deportiva. Con estos datos, puedo hacer que uno de mis deportistas que requiere una mejora de una destreza en particular, pueda orientarla a la práctica de otro deporte “x” veces por semana para realizar dicho aprendizaje más rápidamente. Dar un pequeño paso más adelante en lo que a planificación se refiere. Una búsqueda eterna de la mejora.

Conclusiones

Como conclusión, quisiera terminar con el principio, con los Juegos y con las ganas de ver cómo la cuadratura del círculo se cierra, tras 5 años de preparación con todo lo que ha habido de por medio. Culminando un disfrute visto desde distintas perspectivas, y disfrutando del trabajo realizado con los equipos técnicos para verles allí, rematando tantas y tantas horas de esfuerzo, sudor y lágrimas. Sin más, para los que estéis allí, disfrutad de participar en un evento histórico como es éste. Para los que ganéis disfrutad de entrar en la leyenda, y para los que lo veáis disfrutad del espectáculo.

¡¡¡QUE COMIENCEN LOS JUEGOS!!!

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