La importancia de hacer deporte bien

Siempre he intentado pensar que las personas son tremendamente dependientes de sus estados de animo, porque esos estados son los que hacen que tengamos la capacidad de hacer cosas mejor, parece simple…, pero es clave, fijaros la importancia de unas pocas palabras: “hacer las cosas bien”.

Desde niño he estado vinculado al mundo del deporte, primero como futbolista, luego como entrenador e incluso después como responsable en áreas de gestión, y he comprobado como el rendimiento de los seres humanos está en intima relación con su predisposición a arriesgar, a sentirse capaces de alcanzar el éxito, a logar y superar niveles elevados de confianza y motivación.

En la vida profesional de cualquier persona ocurre otro tanto, cumplir retos va estrechamente vinculado a su felicidad, a su alegría mantenida en el desarrollo de sus tareas, a conocer su evolución y creerse útiles y valorados.

En los momentos actuales la tecnología ha aumentado la capacidad de innovar de manera exponencial, las posibilidades para aplicar evoluciones al servicio de las actividades humanas son una obligación ineludible para aprovechar su utilización, pero que debe respetar las normas que la ética competitiva en cualquier sector debe poseer.

Vida, estado de animo, rendimiento, éxito, felicidad, tecnología, innovación… son algo mas que palabras para definir y que cuando se juntan en un mismo entorno conforman el escenario adecuado para disfrutar. El deporte es un vinculo común donde todas ellas están presentes.

Muchas personas hacen deporte y para todas ellas debe ser una máxima disponer de las condiciones adecuadas para su realización. Aquí se debe marcar una diferencia fundamental, los niños deben disfrutar del deporte como un juego, sin exigencias que les limiten sus derechos de niñez y con las obligaciones de divertirse a través de ese juego.

Sin marcar diferencias, para ellos –los niños/as- y para todos los demás –los no niños/as- hay otros aspectos que son claves en la realización de una actividad física: el control, una adecuada gestión y el seguimiento para convertir esa actividad deportiva en una opción de mejora del estado de salud. El deporte es la mejor receta para la salud, para prevenir y para mejorar, pero siempre desde un deporte controlado y ejecutado de manera correcta.

Aprovecharse de las innovaciones presentes y futuras puede ayudar a ello. Poder controlar que el practicante esté dentro de unos limites adecuados de trabajo, respetando sus aspectos y limitaciones físicas, fisiológicas y psicológicas es obligado; poder gestionar que se alcanza el estado de rendimiento óptimo y se mantiene de forma adecuada sin provocar posibles lesiones es importante; poder medir y parametrizar datos de la actividad diaria para crear patrones individualizados que permitan prever posibles riesgos cardiovasculares o de otro tipo es una ventaja y una evolución humana que aporta calidad de vida.
Como decía al empezar: se trata de hacer las cosas bien, se trata de hacer deporte bien.

Javier Gómez es empresario y entrenador UEFA PRO de Futbol

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